Ya no es el silencio roto, los cuchicheos y el séptimo de caballería en forma de tacones lo que más me saca de quicio en las bibliotecas de las universidades, pues un nuevo elemento se ha unido a los anteriores con mayor fuerza, hablo de las redes sociales.
En cada biblioteca hay una serie de ordenadores, sobre todo con una finalidad; la de consulta de libros. Dato, del que no se enteran muchos de los universitarios que no pierden la ocasión de quedarse embobados mirando la pantalla, hipnóticos, click, click, foto aquí, comentario allá, sumergidos en el patetismo absoluto, sin respetar a los que de verdad necesitan los ordenadores para consultarlos como bases de datos.
He llegado a la conclusión de que es una enfermedad, la única solución en este caso sería “capar” dichas redes. Una vez cortadas, sería gracioso ver a uno de estos adictos irrespetuosos aporrear el teclado y el ratón, notar en su tez la desesperación, mientras en la pantalla una pequeña ventana dándole “error” al susodicho, rezara así; “Error, esto es una biblioteca y ante ti tienes toda una fuente de conocimientos por hallar, un mare mágnum sin fin, afluentes en forma de libro que desembocan en el inmenso océano de la sabiduría”. Palabras, que se escaparían del lector, por lo que saldría de la biblioteca con su cabeza llena de serrín, sin comprender lo que significa Biblioteca y lo que uno puede encontrar dentro de ella.
Ja ja. Muy bueno. Deberían acoger tu sugerencia :D
ResponderEliminarComo Bibliotecaria, Archivera y Documentalista, este tema me toca de lleno. Y aunque como tú mismo me paso horas en el tuenti, etc, opino igual... para chatear, te vas al locutorio, cyber o tu casa. La biblioteca es un centro de estudio y trabajo personal.
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