martes, 30 de septiembre de 2014

Cospedal, la caza, ciudadanos y psicópatas.

El problema

En el conjunto de España el maltrato animal se institucionaliza en forma de festejos. Los individuos que acuden y practican dichos actos se agarran al clavo ardiendo de la tradición y otros con un par de mandolinas nos hablan de cultura. En las profundidades de cada Comunidad Autónoma ( sin excepción) podemos contemplar estupefactos atrocidades que retratan las entrañas psicópatas de una parte de la ciudadanía que disfruta produciendo sufrimiento. No estamos hablando de un ejercicio de supervivencia de una especie sobre otra, hablamos de acciones tapizadas bajo el apartado del ocio popular, un claro ejemplo es Tordesillas.   

En Tordesillas, bajo el manto institucional un número de individuos lanza en mano se propone acabar con la vida de un toro. En la pasada edición algunos activistas animalistas fueron insultados y apedreados por los "lanceros". Sólo hay que atender a las miradas, gestos y el empleo del lenguaje para dibujar un claro perfil. Nos encontramos ante personas psicópatas cuya válvula de escape es aniquilar a un toro, mientras, el alcalde da su beneplácito al sentir popular para que no le muevan de la silla. 

Ahora Cospedal en Castilla la Mancha da prioridad a la caza por la caza y no te descuides que si paseas por el monte te puede meter un cuarto de plomo por la espalda. Perros y gatos también están sobre el tablero, nada ni nadie se salva, incluso permiten trampas y caza a jabalíes con lanza como antaño, más sufrimiento, más dolor innecesario. Un absurdo en el siglo XXI que insulta a la capacidad de raciocinio y la propia evolución de la sociedad. 

¿Qué hacemos ante la barbarie?

La única solución ante este tipo de objetos que se refugian en las instituciones es simple pero a la vez compleja: valores cívicos, educación y cultura. 

¿Cómo lo ponemos en práctica?

La carcasa se puede cambiar pero si las piezas de dentro son las mismas poco hay que hacer y realmente, es necesario cambiar piezas y tras ello la carcasa cambiará sola. El proceso es lento pero fructífero, las proclamas del "ya y el ahora" son propias de una sociedad capitalista que consume sentimientos sin sentirlos. Las escuelas y los medios de comunicación son claves para el proceso. La creación de un pueblo culto es la única solución ante la barbarie, corrupción y maltrato humano u animal, entre otros aspectos.

Esto es un pequeño bosquejo de opinión. 

Mientras tanto sabemos lo que hay. 




No hay comentarios:

Publicar un comentario